Dos mujeres en la cama...

Acordes suenan
Colores brillan
Aromas vuelan
Sabores estallan.
Tu y yo
en esta cuarto oscuro,
presas de la noche
y el deseo.
Conoces tan bien éste
mi cuerpo que es tuyo.
Manos precisas,
lenguas voraces.
Las horas se vuelven
segundos en tus brazos.
Mis dedos exploran tu cuerpo
como buscando un tesoro.
Mis boca sedienta
anhela tus besos.
Tu respiración entrecortada
encuentra la mía
Tú, tan húmeda y exquisita.
Yo, tan receptiva y entregada a la vez.
Nuestros cuerpos unidos
en un solo latido.
Entrelazadas,
piel con piel.
Tu nombre y el mío
escapan entre jadeos silenciados.
La luz de la luna
sorprende nuestra desnudez.
Dos mujeres en la cama,
amándose hasta el amanecer.

Amanecer...

Te veo esta mañana
y estás más radiante que nunca.
No puedo creer que pasaste
la noche en mis brazos.
Sigues dormida,
yo, te observo.
Miro tu ojos cerrados.
Aspiro el aroma de tu cuello,
el espacio entre tu senos
es un abismo celstial.
Te veo tan quieta,
tan ingenua.
Los recuerdos de la noche anterior
viajan en mi mente.
Tú tan bella,
tu desnudez inocente
juega a las escondidas
con la primera luz del día.
Tu piel suave contra la mía.
Tú, en paz.
Yo, con ansias de ti.
Me niego a despertarte,
privarme de esta imagen sería cruel.
Lentamente te volteas
sin darte cuenta que te observo.
Sigues soñando tranquila.
La sábana resbala
revelando la línea de tu espalda,
esa espalda que solo anoche
llené de besos...

Dos puertas y una escalera...

Sólo nos separan dos puertas
y una escalera.
El espacio vacío a mi lado
reclama tu cuerpo.
La almohada junto a mi
desprende tu aroma,
el aroma de tus cabellos.
La sábana suave no se compara
con la suavidad de tu cuerpo.
Mi boca sedienta anhela tus labios,
tu piel,
tus besos sabor a dicha,
tu cuerpo sabor a mar.
Mis manos queiren recorrerte sin censura.
Sueño con saborear tu desnudez.
Un torbellino de sensaciones en mi.
Pienso en ti, en mi,
la soledad tan llena de nosotras.
Percibo tu olor,
tu sabor en mi imaginación.
Estás ausente pero tan dentro de mi.
Estás en mi aliento y en mi pensamiento.
Estás en la punta de mis dedos
y en cada parte de mi ser.
Es tu presencia una necesidad que se vuelve dolorosa.
Eres mi deseo noche y día.
Eres alimento de mi alma.
Eres el alma de mi ser.

Día nuevo...

Llegó el día.
Cuando pensé la noche eterna era,
los vientos no son fuertes por nuestro amor de luces oscuras.
A toda hora navegas en mi sangre,
tu nombre vive en mis pulmones.
Tu voz, relámpagos azules de eternos suspiros.
Toma este día amor,
todo este día nuevo.
Amárrame a tus latidos,
emborráchame de tu amor.
Descúbreme, tócame,
saborea las luces gota a gota,
la luz y sombra que te ofrezco en mis labios arrepentidos.
Tus besos, peyote envuelto en hojas de ternura y simpleza,
ahogados en dos palabras,
murmullos de amor.
Dejaré que respires mi aroma y transpires en mi cuerpo,
dejaré bebas de mi boca,
derretirme en tus manos,
déjame arrojarme en ti como una roca a la laguna.
Dejémonos lamer nuestro sabor,
y saborear nuestra desnudez.


Este fue mi regalo de 14 de frebrero de parte de mi novia y la vdd me encantó el detalle y me dieron ganas de escribir algo remotamente hermoso pero no lo logré asi q aqui les comparto este...

Un arcoiris en tonos pasteles...

Veo un arcoiris en tonos pasteles a través de tu ventana,
no quiero salir de tu cama,
renunciar a tu cuerpo junto al mío sería un pecado mortal,
negar el calor que desprendo a tu lado, una mentira eterna.

La lluvia tibia sigue golpeando el cristal,
no puedo dejar de pensarte,
mis manos te buscan de nuevo,
mis labios buscando tu aliento...

Susurro...

Susurro cada noche a tu oído

las palabras de deseo

que tú solo susurras con tus labios escondidos

dulce arrullo de niña eterna

en tus brazos la paz interna

Por primera vez...

Hoy te miré,

vi esos ojos que roban el alma con una mirada y

te amé,

te amé como si fuera la primera vez.

Hoy te abracé,

rodeé tu cuerpo con mis brazos, reposé la cabeza en tu hombro y

te amé,

te amé como te amo desde la primera vez.

Hoy te besé,

rocé tus labios por un instante, esos labios que con un beso me dejan sin aliento y

te amé,

te amé como la primera vez.

Hoy tomé tu mano,

esa mano que cuando recorre mi piel me lleva hasta la locura y

te amé,

te amé pensando en la primera vez.

Hoy hicimos el amor,

despacio y sin prisas encontré tu cuerpo, lo saboreé con la punta de mis dedos y

te amé,

te amé sabiendo que no era la primera vez.

Hoy dormí a tu lado,

con la cabeza sobre tu pecho escuché tu corazón mientras dormías y

te amé,

te amé soñando que era la primera vez.

Hoy desperté junto a ti,

vi el amanecer reflejarse en tu rostro sereno y

te amé,

te amé recordando la primera vez.

Hoy te vi partir,

extrañándote mientras caminabas en la lejanía y

te amé,

te amé como quien ama por primera vez.

Hoy lloré por ti,

lloré como se llora a quien esperas que vuelva y

te amé,

te amé esperando tu regreso como por primera vez.

Hoy te sonreí,

sonreí al saber que regresabas a mi y

te amé,

te amé como lo seguiré haciendo,

siempre por primera vez.